Conocida como la ruta de la leche o “La Suiza Antioqueña” debido a su geografía y al verde interminable de sus fértiles pastizales. Viajar por esta región siempre fresca y soñadora es un encuentro con la vida pacífica y tranquila de las afueras, que puedes respirar y sentir en la piel durante todo el viaje. Lo creas o no en esta aventura, también podrás ver lo que se conoce como la “Capilla Sixtina de Antioquia”, disfrutar de las maravillas de los productos lácteos, el pescado y comer la trucha más fresca que puedas imaginar. También podrás vivir aventuras en el cielo, parapente o en tierra montando en un cuadraciclo.